Desde su debut en 1986, The Legend of Zelda ha dejado una huella imborrable en la historia de los videojuegos, estableciéndose como una franquicia que ha evolucionado con cada nueva entrega. A lo largo de los años, la serie ha explorado nuevos caminos, desafiando tanto las expectativas como las convenciones del género. Hoy, tras décadas de aventuras con el icónico Link, llegamos a un momento crucial: el protagonismo de Zelda en Echoes of Wisdom. No solo marca un giro emocionante en la fórmula clásica, sino que también refleja cuánto ha crecido y se ha transformado esta saga para llegar hasta aquí.
The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom es una entrega emocionante que coloca a la princesa Zelda en el papel principal como heroína y maga. Con un motor gráfico similar al remake de Link’s Awakening, el juego combina el encanto clásico de la serie con mecánicas renovadas, ofreciendo una experiencia fresca y creativa.
Una de las grandes innovaciones es el uso del «Tri Rod», que permite a Zelda invocar “ecos”, criaturas mágicas que ayudan a resolver acertijos y derrotar enemigos. Aunque el sistema de ecos proporciona libertad y personalización, la gestión de más de 60 ecos puede volverse caótica y frustrante, lo que podría limitar la variedad estratégica.
La trama sigue a Zelda y su compañero Tri, quienes deben salvar a Hyrule de misteriosas grietas mágicas. A lo largo del viaje, encontrarán historias entrañables, aunque algunas son menos memorables. El desarrollo de Zelda como heroína podría haber sido más profundo, decepcionando a quienes esperaban una evolución significativa.
El mundo de Hyrule está lleno de secretos y presenta escenarios fascinantes, incluido el Still World, una dimensión onírica que recuerda a Super Mario Galaxy y ofrece algunos de los puzles más desafiantes del juego. El combate es estratégico, pero la inteligencia artificial de los ecos puede ser torpe, lo que puede frustrar en batallas más intensas. Afortunadamente, Zelda puede transformarse en una versión «espadachina» para recuperar habilidades clásicas de Link.
Visualmente, el juego tiene un atractivo estético, aunque hay problemas de rendimiento en secuencias de acción rápida. Sin embargo, la banda sonora es rica y nostálgica, con temas que rinden homenaje a los clásicos de Zelda.
Esta entrega ofrece una experiencia refrescante centrada en la magia y el protagonismo de Zelda. A pesar de algunos inconvenientes en la gestión de ecos y el desarrollo de la narrativa, el encanto de la jugabilidad y los intrincados puzles hacen de este título una adición valiosa a la franquicia. Los fanáticos de Zelda disfrutarán explorando y resolviendo acertijos, aunque quienes busquen una narrativa más sólida podrían sentirse un poco divididos.
En definitiva, The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom nos ofrece una perspectiva renovada de la serie, poniendo a Zelda en el centro de una historia llena de magia, acertijos y aventuras. Aunque algunos elementos podrían haber sido más pulidos, el encanto y la innovación que trae este título son innegables. Es un juego que invita a los fanáticos a debatir sobre la evolución de la franquicia y lo que podrían esperar en futuras entregas. ¿Será este el comienzo de una nueva era para Zelda como protagonista? Solo el tiempo y su reacción como jugadores lo dirán.