Reseña: Star Wars Outlaws (2024)

Si alguna vez soñaste con ser un forajido en una galaxia muy, muy lejana, ‘Star Wars Outlaws’ te tiene cubierto. Ubisoft, conocido por crear mundos abiertos que te atrapan por horas, ha hecho lo suyo otra vez. Esta vez, sin sables láser ni la Fuerza de por medio, sino con aventuras al más puro estilo Han Solo y un montón de caos espacial. Prepárate para meterte en líos, robar naves y dejar tu huella en el universo de Star Wars de una manera totalmente diferente.

Star Wars Outlaws nos introduce en la piel de Kay Vess, una criminal en ascenso que se ha hecho un nombre en Canto Bight. Desde el momento en que roba una nave para escapar, comienza su odisea por la galaxia, encontrándose con algunas de las bandas criminales más infames del universo de Star Wars. A medida que avanza en su viaje, Kay se dedica a trabajos para estas bandas, dejándose llevar por la corriente y viendo hasta dónde la lleva su destino.

Para disfrutar de Star Wars Outlaws no necesitas ser un experto en la saga, aunque los fanáticos de la franquicia definitivamente apreciarán más los detalles y guiños. La historia es accesible, los personajes y escenarios se presentan de manera clara, lo que hace que sea fácil sumergirse en el juego, incluso si no estás tan familiarizado con el universo de Star Wars.

La aventura se desarrolla de manera que la reputación de Kay con las diferentes bandas puede influir en cómo juegas, aunque no cambia la historia principal. Puedes elegir concentrarte en la banda que más te guste, pero cuidado, las demás no te la pondrán fácil y deberás enfrentarte a sus disparos.

La exploración es uno de los puntos fuertes del juego. No te limitarás a un solo lugar; visitarás diferentes planetas, lo que mantiene la experiencia fresca y evita que la exploración se sienta monótona. Además, no todos los puntos de interés están marcados en el mapa, lo que añade un elemento de descubrimiento mientras exploras el vasto universo.

Para desplazarte, tienes varias opciones: puedes usar el viaje rápido, ir a pie o montar en tu speeder. La conducción del speeder es especialmente satisfactoria, fluida y muy divertida, con la posibilidad de mejorar tu experiencia con diferentes actualizaciones.

El juego también incorpora elementos de RPG, permitiéndote equipar a Kay con ropa que ofrece mejoras, actualizar su blaster, nave y speeder, y desbloquear nuevas habilidades. Esto requiere recolectar materiales explorando las diferentes bases que encuentras en tu camino.

Kay no está sola en su viaje; Nix, su leal merqaal, la acompaña y es un gran apoyo en sus actividades criminales. Nix puede distraer enemigos, activar mecanismos, recoger objetos e incluso traer armas, siendo un compañero valioso especialmente en las misiones de sigilo, que son una parte central del gameplay.

El combate, por su parte, tiene un toque de shooter, pero algo más relajado. Kay no posee grandes poderes ni habilidades especiales, así que depende mucho del sigilo. Sin embargo, cuando la situación lo amerita, sabe cómo defenderse con armas de fuego y a puño limpio. Las batallas en el espacio ofrecen una experiencia decente, aunque no tan precisa como otros títulos del género.

Visualmente, Star Wars Outlaws es un deleite, con paisajes y escenarios que invitan a tomar capturas en el modo foto. No obstante, el juego no está exento de problemas. Algunos bugs, un mal común en los títulos de mundo abierto de Ubisoft, pueden hacer acto de presencia. Aunque la mayoría son inofensivos, uno en particular me obligó a reiniciar una misión cuando Kay quedó atrapada en un contenedor.

A pesar de sus fallas, el tiempo invertido en Star Wars Outlaws ha sido gratificante. Hay mucho por hacer, pero para evitar que se vuelva repetitivo, es mejor avanzar poco a poco en la historia, desbloquear nuevas habilidades y volver a explorar. Si te acercas al juego con la mentalidad de disfrutarlo de manera casual, lo pasarás en grande.